LXXXIII
Guitarra del mesón que hoy suenas jota, mañana petenera, según quien llega y tañe las empolvadas cuerdas.
Guitarra del mesón de los caminos, no fuiste nunca, ni serás, poeta.
Tú eres alma que dice su armonía solitaria a las almas pasajeras...
Y siempre que te escucha el caminante sueña escuchar un aire de su tierra.