CXXVI
A JOSÉ MARÍA PALACIO
Palacio, buen amigo,
¿está la primavera
vistiendo ya las ramas de los chopos
del río y los caminos? En la estepa
del alto Duero, Primavera tarda,
¡pero es tan bella y dulce cuando llega!...
¿Tienen los
viejos olmos
algunas hojas nuevas?
Aún las acacias
estarán desnudas
y nevados los montes de las sierras.
¡Oh mole del
Moncayo blanca y rosa,
allá, en el cielo de Aragón, tan bella!
¿Hay zarzas
florecidas
entré las grises peñas,
y blancas margaritas
entre la fina hierba?
Por esos campanarios
ya habrán ido llegando las cigüeñas.
Habrá trigales
verdes,
y mulas pardas en las sementeras,
y labriegos que siembran los tardíos
con las lluvias de abril. Ya las abejas
libarán del tomillo y el romero.
¿Hay ciruelos
en flor? ¿Quedan violetas?
Furtivos cazadores,
los reclamos
de la perdiz bajo las capas luengas,
no faltarán. Palacio, buen amigo,
¿tienen ya
ruiseñores las riberas?
Con los primeros
lirios
y las primeras rosas de las huertas,
en una tarde azul, sube al Espino,
al alto Espino donde está su tierra...
Baeza, 29 de abril
de 1913.
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