Réquiem-pace*
recuerdos de una
catástrofe
conmuévase
el surgimiento
desbórdense
los mares con rabia fiera
desquíciense
los ejes del firmamento
deténganse
los astros en su carrera
estremézcase
el mundo sobre su asiento
y rásquese
en pedazos la azul esfera
porque en la hermosa
tierra de Extremadura
patria de cazadores
finos y diestros
recibió
para siempre la sepultura
la fama del maestro
de los maestros
la poética
dehesa de membrillares
acaba de ser uno
de los testigos
del azar más
horrible de los azares
del castigo más
grande de los castigos
en ella ha recibido
tumba sombría
la fama del maestro
de más fortuna
que según
mis noticias se conocía
en la clásica
tierra de la aceituna
tres primero en
el humo de los honores
que breves son
las dichas en esta vida
como queda una
fama de las mayores
en una solitaria
rumba escondida
sobre la cual
mañana muy divertida
merendara una
turba de cazadores
hay de los que
su tierra tuvieron fama
de sabios tiradores
diestros y finos
y a la mejor no
saben ser asesinos
de una fiera que
inmóvil duerme en su cama
no forme nuestra
risa triste contraste
con la fama de
un hombre que se derrumba
rescatemos la
historia de su desastre
y yo lloremos
un rato sobre su tumba
---
triste día
el veintitrés
del pasado mes
de abril
maldita la bravas
res
causa de hazaña
vil
campiña
de membrillares
nido de bichos
bribones
inolvidables lugares
del frontal y
cazadores
habéis
sido los testigos
de la desgracia
mayor
que ante sus propios
amigos
ha sufrido un
cazador
hagamos la breve
historia
de aquella triste
jornada
que quedará
en la memoria
perfectamente
grabada
cuéntase
que cierto día
de recuerdos tan
risueños
se fueron de montería
unos cuantos extremeños
don Matías
siempre amable
puso a acacio
disposición
el caza de lo
envidiable
que fue el lugar
de la acción
hablando de lo
que infiero
allá se
fueron por fin
el indispensable
Higuero
Estanislao y Joaquín
ese secreto y
muy despacio
os diré
que a la función
fue también
un don Acacio
que dicen que
era el matón
a resacar y a
bullir bullirán
fueron unos castellanos
cuánto
debieron reír
mis simpáticos
paisanos
la historia dice
muy poco
de aquella gran
cacería
ni yo he sabido
tampoco
como se celebraría
lo que yo siempre
he sabido
es que el Acacio
en cuestión
cazador célebre
ha sido
con razón
o sin razón
en fin ahora no
se trata
de si es verdad
o mentira
presidida es porque
mata
o si mata es porque
tira
no me atrevo a
decir yo
que le ocurra
lo que a mí
en acierto, porque
no
y se acierto,
es porque si
lo que es verdad
indudable
es que supo conquistar
la fama más
envidiable
que se puede imaginar
pobres de los
principiantes
a quienes él
enseñaba
que burlas tan
irritantes
por sus torpezas
les daba
que sátiras
tan crueles
de sus labios
escucharon
los cazadores
noveles
que a cazar le
acompañaron
que guasonas carcajadas
siempre en la
boca tenía
que burlas tan
aceradas
propinaba al que
caía
el jamás
equivocaba
porque el tiro
de su mano
iba donde él
le mandaba
con imperio soberano
las balas le obedecían
y cuántas
veces quisiera
en el aire le
escribían
el nombre que
él les dijera
y al influjo soberano
de su voz y su
destreza
se volvían
a su mano
después
de matar la pieza
los prodigios
que él hacía
yo no los puedo
cortar
porque ese empeño
sería
cuento de nunca
acabar
basta decir que
tenía
la vanidad singular
de que su tierra
no había
quien le pudiera
igualar
y era verdad sí
señor
pero si dudara
alguno
del mérito
superior
del matón
número uno
oiga la historia
sencilla
de una portentosa
hazaña
que causará
maravilla
cuando corra por
España
no sé los
preliminares
de lo que os estoy
contando
pero se dice que
en membrillares
estaban todos
cazando
cuando el tirador
famoso
consumista sorprendente
dio un jabalí
como un oso
durmiendo tranquilamente
Rediós,
debió decir
acacio, con mucha
sal
buenas ganas de
morir
en este pobre
animal
si este bicho
supiera
que lo mismo hecho
al suelo
un jabalí
a la carrera
que una mariposa
al vuelo
no se hubiera
ocurrido
presentárseme
despierto
y mucho menos
dormido
que es como contarse
muerto
desdichado jabalí
bien se deja conocer
el nunca oyó
hablar de mí
ni nunca debióme
ver
es un insulto
a mi honor
presentárseme
dormido
a mí, que
jamás he sido
ni asesinos ni
traidor
a mí, que
mi larga vida
de cazador afamado
ni pieza mate
dormida
ni dicho tiré
parado
a mí te
llamo cochinos
a los torpes cazadores
que acechan como
asesinos
y matan como traidores
a mí que
nunca mi fama
ni por capricho
manche
asesinando en
la cama
pieza en ella
encontré
a mí que
para matar
la pieza que necesito
sólo precisó
cerrar
el ojo izquierdo
un poquito
a mí que
puedo mañana
matar si así
me conviene
la codorniz más
temprana
de las del año
que viene
a mí que
si se me apura
dejó redonda
de un tiro
la misma atmósfera
pura
en este instante
respiro
a mí que
aunque no Larrea
si por un capricho
es
le pegó
un tiro a una idea
como si fuera
una res
a mí, que
soy finalmente
modelo de cazadores
admiración
del agente
y envidia de tiradores..
Pobre bicho dejó
atrevido
demandaré
a la cazuela
por castigar tu
descuido
y honrar a santa
Fidela
tu dolor será
instantáneo
pienso meterte
en el cráneo
por el centro
de la frente
voy primero a
calcular
la distancia que
ha de haber
a fin de no destrozar
sesos que yo he
de comer
nota--mientras
esto hablaba
fingiendo firmeza
y brío
me han dicho que
tiritaba
ignoro si era
de frío
y en tanto Joaquín
tiritaba
que apunta a usted
don Acacio?
Y acacio no contestaba
y decía
muy despacio
a la una-y apuntó
a las dos-se puso
al pie
a las tres-y disparó
y a las cuatro
se le fue
es decir que de
repente
se levantó
aquella fiera
y se fue tranquilamente
sin despedirse
siquiera
concho!, caramba,
canastos
caracoles, zapatera,
por vida del as
de bastos
mecachis en la
escopeta
-estas palabras
son mías-
porque las que
él pronunció
ni debieron ser
tan frías
ni aquí
las escribo yo
rayos, truenos
y centellas
que es lo que
a mí me ha pasado?
seguid a escape
esa huella
que el jabalí
va pegado
en mi vida me
ha ocurrido
un desastre tan
horrible
si lo he tirado
dormido
si esto parece
imposible
y diciendo otras
cosillas
de color algo
más fuerte
se pelaba las
patillas
renegando de su
suerte
que rabia y que
desconsuelo
qué vergüenza
y que desaire
que patadas en
el suelo
que puñetazos
al aire
los otros acompañantes
se irritaron como
fiera
día hablaban
amenazantes
con descompuesta
manera
y con razón
no tuvo
porque hubo motivo
allí
para comérselo
crudo
el lugar de jabalí
adiós al
plato mejor
del día
de san Fidel
adiós el
gran tirador
y el de la risa
cruel
adiós la
gloriosa fama
del señor
de las patillas
que al ver un
bicho en la cama
le tiemblan las
pantorrillas
adiós la
hermosa ilusión
de los que fueron
allí
soñando
en un atraco
de carne de jabalí
y ahora señor
don Acacio
vamos a cuentas
conmigo su
sin alterarse
y despacio
quetzal le supo
el castigo?
Que tal sientan
esas planchas
en famosos cazadores
que se han pedido
a sus anchas
de los malos tiradores?
Recuerdo perfectamente
todo lo que usted
gozaba
cuando alegre
y sonriente
estos versos recitaba
distancia-catorce
pasos
posición-atravesado
carrera-casi parado
estorbos-terreno
raso
pues bien vamos
a enmendarlo
y si a usted no
le ofendiera
debiéramos
recitarlos
de la siguiente
manera
distancia-un metro
por junto
posición-enroscadito
carrera-la de
un difunto
estorbos-mucho
miedito
coteje usted estos
datos
con los datos
referidos
y no pierda usted
más ratos
buscando bichos
dormidos
porque si en tal
situación
no lo sabe usted
matar
es usted es lo
más chambón
que se puede imaginar
es triste ver
una fama
en un rato se
derrumba
y de un jabalí
en la cama
viene a encontrar
triste tumba
a mí me
causa dolor
verme obligado
a decir
que usted como
cazador
ha dejado de existir
pero ha sido tan
violento
el golpe que le
ha matado
tenía la
esperanza aliento
de verle resucitado
justo es que llegue
a morir
quien tanto supo
matar
quien tanto supo
reír
justo es que aprenda
a llorar
lo ruin que ha
sido su suerte
es lo que usted
ha tenido
así que
la vez primera
que sufre usted
un revés
no mata usted
una fiera
esta dormida a
sus pies
guárdese
ustedes los trevejos
inhiba usted nada
más
recordando tiempos
viejos
que no volverá
jamás
un poco duro es
decir
que ustedes como
cazador
ha dejado de existir
pero es verdad,
sí señor
viva usted ya
como pueda
pero sin mirar
atrás
porque de atrás
no le queda
ni la afición
ni el compás
enfundé
usted la escopeta
si quiere andar
en lo cierto
haga vida santa
y quieta
y cuéntese
usted por muerto
tenga usted resignación
curesé
la herida abierta
y coloque esta
inscripción
de su despacho
la puerta
por no matar una
res
la vergüenza
remató
membrillares 23
del mes de abril
que pasó
D. José
María Gabriel y Galan
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